Esta tipografía, creada por Michael Want y Richard Kegler para el Museo de Arte de Filadelfia, fue publicada por la fundición P22 en 1996 convirtiéndose en una de sus tipografías más populares. Está basada en la escritura de uno de los artistas franceses más influyen: Paul Cezanne. Sus trazos sueltos reproducen fielmente la caligrafía cursiva del artista. Posee una apariencia muy intrigante que desafía los estereotipos de la típica tipografía caligráfica resultando muy llamativa y natural. Detalles como la barra alargada de la “t” minúscula o el gran lazo que forma la “b” hacen que sea una elección común en muchos diseñadores. Además de este alfabeto también se desarrolló la variante Cezanne Sketches (bocetos) que recrea una gran variedad de imágenes del trabajo de Cezanne. En 2005 y con la colaboración de James Grieshaber, la fundición sacó una versión revisada, Cezanne Pro, añadiéndole caracteres para más idiomas, ligaduras, ornamentos y otras figuras muy interesantes.