Creada por Adrian Frutiger en 1984, la Versailles está basada en las tipografías latinas francesas de finales del siglo XIX, caracterizadas por poseer serifs triangulares y fuertes. La influencia más directa para este diseño está en las escrituras de la parte posterior del monumento en memoria a Charles Garnier, arquitecto de la Ópera de París. Esta tipografía clásica con un estilo distintivo es muy útil para publicidad, carteles, titulares y bloques cortos de texto, transmitiéndole un aspecto fuerte y elegante.